El agillity


El Agillity es una modalidad competitiva que creado por el adiestrador canino Peter Meanwell en la primera mitad de los años 70. La cual consiste en que un guía dirige a un perro sobre una serie de obstáculos, los cuales tiene que librar de manera limpia y lo más exacta posible, compitiendo contra reloj. En el Agillity pueden competir diversas razas de perros desde: Bóxer, Samoyedo, Doberman, Beagle, Rottweiller, Pastor Alemán, perros paria (denominados también perros sin raza), San Bernardo, Pincher, perro Salchicha, Pittbulls, etc.

El Agillity como deporte ofrece distintos obstáculos tales como:

  • Las vallas
  • El balancín
  • El neumático
  • El viaducto o muro
  • La empalizada
  • La ría
  • El salto de longitud
  • La mesa
  • El eslalon
  • La zona de parada
  • El túnel rígido
  • La pasarela
  • Los caballetes
  • El túnel flexible

Si tuviéramos que dar una jerarquía a los factores que transforman a un perro en un buen competidor, tendríamos que  primer el carácter y comportamiento de nuestro perro, un perro rebelde puede ser todo un reto para este deporte puesto que debemos primero educarlo y después empezar el entrenamiento agilitero. Un perro  con un adecuado manejo por parte de su guía  lograrán tener  un buen performance. Está  claro decir que la agresividad es un factor altamente indeseable en un perro de Agillity.

En segundo plano estaría la relación entre el guía o entrenador  y su perro. Un buen entendimiento entre ambos, la capacidad del guía  de anticipar o adelantarse a las intenciones de su perro, una relación de colaboración del perro para con su “jefe”, un trato justo hacia el perro, hacen una importante diferencia.

En tercer lugar la actitud del perro en la pista. Hay algunos que preferirían estar durmiendo tranquilamente a estar corriendo y saltando obstáculos. Si no le crea disposición a estar ejercitándose y lo obliga a hacer Agillity su perro tomará esto como un castigo.

En cuarto lugar: NO ESTRESAR A SU PERRO. Su perro no es un perro de policía ni de guerra al cual usted va a entrenar como para atacar o rescatar heridos en combate, muchos entrenadores comenten ese gran error garrafal de gritar a sus perros, y hacerlos entrenar como si el perro fuese para la guerra, lo cual genera al perro un stress que a la larga terminaría por volver al can agresivo. Los perros de policía o los perros de guerra son perros que reciben otro entrenamiento con personal especializado de nuestras fuerzas armadas, por mas esta decir, que si usted entrena al perro a atacar puede volverlo un arma de doble filo.
Por contrario cuando uno ve perros con ganas de salir a correr que van felices en su recorrido por la pista, estamos frente a ejemplares que siempre tendrán un buen cometido. Como pueden leer no hemos mencionado la raza como un factor o un impedimentos, sin embargo no se puede desconocer que hay aspectos raciales tanto de temperamento como físicas que unidas a los factores ya mencionados pueden producir mezclas explosivas o desastrosas.

Redactado por Luis Landeo